De la Patagonia hasta el noroeste argentino. De Tierra del Fuego a Jujuy, 36 parques nacionales y casi 4 millones de hectáreas de suelo concentran lo más rico de la fauna y la flora de nuestro país. Qué especies y diversidades ofrece cada uno, cuáles son sus particularidades y diferencias, cuándo se fundaron y quiénes son los que los cuidan.
Hoy vamos hablar de la protección y la conservación de las aguas argentinas. Mercedes Santos es bióloga y especialista en el tema. Las áreas marinas protegidas son grandes áreas de la argentina que están ubicadas en el sur, aproximadamente entre Malvinas y la Isla de los Estados. Este lugar se ha definido como un lugar de lato valor para su conservación por la biodiversidad.
¿Podríamos decir que sería cómo un parque nacional pero en el mar entonces?
Sí son áreas protegidas todas, con la diferencia que en el mar no tenemos la posibilidad de perimetral una zona con alambre, entonces lo que cambia es la gestión, o sea la manera de cuidarlas.
En el mar es necesario proteger los fondos, donde hay una diversidad muy amplia y muchas veces con la pesca intensiva y las redes que van hasta el fondo dañan la biodiversidad, y que a su vez altera el proceso que hacen estos organismos que es la de absorción de carbono, lo que hace a una medida de mitigación si hablamos de cambio climático y calentamiento global.
Ese es uno de los motivos a tener en cuenta a la hora de proteger el fondo. Si hablamos de áreas marinas protegidas, en nuestro país sólo el 8% del mar argentino está protegido. Lo importante es poder representar las áreas marinas de diferentes lugares del mar argentino para que se logren proteger los distintos ecosistemas.
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